La Ley en su Exposición de Motivos indicó que Castilla y León, que conoce hoy la presencia de empresas cooperativas como vigorosa y dinámica fórmula societaria en los más diversos sectores de su estructura económica y social, incorpora a su instrumentación de dinamización y de máximo aprovechamiento de los recursos disponibles, la esencia de un espíritu solidario que ha pervivido en el tiempo en entidades e instituciones de los más diversos orígenes.
La Ley también estableció un nuevo concepto de cooperativa, en consonancia con la tendencia actual, menos organicista y de remisión a la autonomía de voluntad de los socios, se formula una concepción amplia de cooperativa no negando a ninguna actividad económica o social la posibilidad de constituirse en cooperativas.
La nueva Ley de Cooperativas, además de flexibilizar y agilizar los trámites, va a permitir impulsar nuevas cooperativas, principalmente en el ámbito rural, medio predominante en Castilla y León. Como vienen demostrando los estudios realizados, donde existen cooperativas arraigadas, la población se encuentra enraizada al territorio, habiendo que progrese social y sosteniblemente.
En 2018, en Castilla y León se crearon cerca del medio centenar de cooperativas, teniendo una tendencia positiva, que se espera que en 2019 se vea consolidada.
Más del 30% de las Cooperativas existentes en Castilla y León son de Trabajo, fórmula empresarial que permite que las personas trabajadoras sean las propietarias de la empresa, creando empleo estable y de calidad.
Esta nueva legislación, unida al trabajo desarrollado por la organización de cooperativas de trabajo de Castilla y León, OWEN y el apoyo desde COCETA consideramos que permitirá una mayor creación de cooperativas de trabajo y la consolidación de las existentes.