Desde la Confederación Española de Cooperativas de Trabajo (COCETA), en representación de casi medio millón de trabajadores y trabajadoras que al final dependen económicamente de más de 17.000 empresas cooperativas en todo el país, seguimos pensando en aquellas medidas imprescindibles para remontar el vuelo tras esta brutal crisis provocada por la Covid-19. Por ello, entre las ya solicitadas y las que se han ido tomando desde las distintas administraciones, nos parece fundamental que la presentación del Impuesto de Sociedades se retrase hasta septiembre (si tenemos en cuenta que, como se ha barajado en distintos foros, agosto podría ser este año 2020 hábil a todos los efectos).
Hace unos días, el presidente de COCETA, Luis Miguel Jurado, lanzó la petición de aplazar “en al menos un mes” la presentación de Impuestos como el IRPF, el IVA o el de Sociedades. “Esta crisis sin precedentes, a la que nos estamos adaptando sobre la marcha, procurando a la vez poner la vista más allá para intentar salvar el empleo de miles de cooperativistas, nos hace tener claro hoy que el Impuesto de Sociedades, como mínimo, hay que poder retrasarlo a septiembre”, matiza ahora.
Jurado reclama en general una mayor atención a las empresas que son el motor de la economía social, un modelo que con esta crisis no debe ignorarse ni dejarse a un lado, todo lo contrario, puesto que es el que debería marcar las pautas del mundo post COVID19. “Insisto en que el cooperativismo es la clave para salir de esta juntos y más unidos, pero no podemos hacerlo sin la colaboración del Gobierno de España y de los gobiernos autonómicos. Las cooperativas de trabajo estamos demostrando que somos empresas con el mayor grado de compromiso social y que nuestra apuesta es la más firme por mantener el empleo, siendo flexibles al máximo en esta situación anómala. Está en nuestro ADN, somos economía social y para nosotros lo primero son las personas. Ahora bien, arrimamos el hombro, pero que no se olviden de nosotros. Queremos y necesitamos mayor presencia en las medidas gubernamentales que nos ayuden a seguir sosteniendo a cientos de pymes y micropymes, que es lo que en su mayoría somos las cooperativas de trabajo”.
COCETA, en colaboración con sus organizaciones confederadas en los distintos territorios de España, sigue estudiando día a día los efectos de esta crisis sanitaria en las cooperativas de trabajo, y perfilando medidas para procurar que los mismos, insorteables, sean lo menos dañinos posible. Asimismo, elaborando propuestas para relanzar el modelo del cooperativismo de trabajo sin dejar pasar un tiempo que no nos podemos permitir perder, en paralelo al primer objetivo de acabar con la emergencia sanitaria.